En el arte de la repostería, hay algunos ingredientes que a menudo se pasan por alto. Sin embargo, pueden hacer una gran diferencia en el sabor y la textura de tus postres. Aquí te presentamos los 4 ingredientes más subestimados en la repostería.
Azúcar Muscovado
El azúcar muscovado es un tipo de azúcar de caña sin refinar, muy oscuro y con un fuerte sabor a melaza. Se utiliza a menudo en recetas de postres ricos y decadentes, pero también puede aportar profundidad y complejidad a las recetas más sencillas. Aunque muchas personas optan por el azúcar blanco refinado, el azúcar muscovado puede aportar un sabor más sofisticado y distintivo.
Sal
La sal es otro ingrediente que a menudo se subestima en la repostería. Contrariamente a lo que se podría pensar, la sal no sólo se usa para realzar el sabor de los postres, sino que también puede ayudar a equilibrar la dulzura y aportar una sutileza que a menudo se pasa por alto. Un pequeño toque de sal puede marcar una gran diferencia.
Mantequilla sin sal
La mantequilla sin sal es otro ingrediente subestimado en la repostería. Aunque la mantequilla salada puede aportar un toque de sabor a ciertos postres, la mantequilla sin sal permite un control total sobre la cantidad de sal en la receta. Además, la mantequilla sin sal a menudo tiene un sabor más puro y cremoso que puede mejorar la textura de los postres.
Vinagre
Por último, pero no menos importante, el vinagre es un ingrediente que a menudo se pasa por alto en la repostería. Aunque pueda parecer extraño, el vinagre puede ayudar a equilibrar el sabor de los postres, evitando que sean demasiado dulces. Además, puede ayudar a suavizar la textura de ciertos postres y aportar un ligero toque de acidez.
Así que la próxima vez que te pongas a hacer repostería, considera darle una segunda oportunidad a estos ingredientes subestimados. Puede que te sorprendas de cómo pueden mejorar tus recetas.
