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En el mundo de la repostería, hay una tendencia creciente hacia la incorporación de superalimentos en las recetas. Estos alimentos, ricos en nutrientes, pueden aportar un extra de sabor y salud a tus postres. A continuación, te mostramos cuatro maneras de incorporar superalimentos en tus postres.
1. Añadir superalimentos en polvo
Los superalimentos en polvo, como la espirulina, el cacao crudo o la maca, son una excelente manera de incorporar estos nutrientes en tus postres. Simplemente puedes añadir una cucharada de estos polvos a tus recetas de pasteles, galletas o helados para aumentar su valor nutricional.
Por ejemplo, puedes preparar brownies de cacao crudo y avellanas. Para ello, necesitarás:
- 200 g de avellanas
- 200 g de dátiles
- 50 g de cacao crudo en polvo
- Una pizca de sal
Tritura las avellanas, añade los dátiles, el cacao y la sal, y mezcla hasta obtener una masa. Extiéndela en un molde y refrigera durante al menos dos horas. ¡Y ya estarán listos tus deliciosos brownies saludables!
2. Utilizar semillas como superalimentos
Las semillas, como las de chía o lino, son un superalimento que puedes incorporar en tus postres. Puedes usarlas para hacer un pudding, añadirlas a tu granola casera o espolvorearlas sobre tus postres.
Un ejemplo de receta utilizando semillas como superalimento sería el pudding de chía y mango. Necesitarás:
- 3 cucharadas de semillas de chía
- 1 taza de leche de almendras
- 1 mango maduro
- Miel al gusto
Mezcla las semillas de chía con la leche de almendras y deja reposar durante la noche. Al día siguiente, sirve el pudding con mango cortado en cubos y un chorrito de miel.
3. Incorporar frutos secos y bayas
Los frutos secos y las bayas son otros superalimentos que puedes incorporar en tus postres. Almendras, nueces, arándanos, goji... son solo algunos ejemplos. Puedes añadirlos a tus tartas, muffins o galletas para darles un toque crujiente y nutritivo.
Una receta sencilla podría ser muffins de arándanos y almendras. Necesitarás:
- 200 g de harina integral
- 100 g de azúcar de coco
- 1 cucharadita de levadura
- 100 g de almendras picadas
- 150 g de arándanos
- 2 huevos
- 100 ml de aceite de oliva virgen extra
- 100 ml de leche de almendras
Mezcla los ingredientes secos, luego añade los huevos, el aceite y la leche. Por último, incorpora las almendras y los arándanos. Hornea a 180ºC durante 20-25 minutos.
4. Usar superalimentos en forma de siropes o endulzantes
Finalmente, puedes utilizar superalimentos en forma de siropes o endulzantes naturales. El sirope de ágave, la miel cruda o el azúcar de coco son algunos ejemplos. Puedes usarlos para endulzar tus postres de manera saludable y añadiendo un extra de nutrientes.
Por ejemplo, podrías preparar galletas de avena y miel. Necesitarás:
- 200 g de copos de avena
- 100 g de miel cruda
- 2 huevos
- 50 ml de aceite de coco
- 50 g de pasas
Mezcla todos los ingredientes, haz pequeñas porciones y hornea a 180ºC durante 15-20 minutos.
Esperamos que estas ideas te inspiren a incorporar superalimentos en tus postres y disfrutar de recetas más nutritivas y sabrosas.