Todos amamos los postres. Sin embargo, a veces hacemos más de lo que podemos comer en una sola sentada, y nos preguntamos cómo conservarlos para disfrutarlos más tarde. En este artículo, te presentaremos tres maneras efectivas de conservar tus postres favoritos.
Conservar postres en la nevera
La nevera es el primer lugar donde pensamos cuando se trata de conservar postres. Aquí te dejamos algunos trucos que te ayudarán a maximizar su vida útil en el refrigerador.
- Utiliza contenedores herméticos: Los contenedores herméticos son la mejor opción para conservar postres en la nevera. Protegen los alimentos de la humedad y los olores de otros alimentos.
- No guardes postres calientes en la nevera: Esto puede elevar la temperatura de la nevera y favorecer el crecimiento de bacterias en otros alimentos. Deja que tus postres se enfríen completamente antes de refrigerarlos.
- Mantén tus postres en la parte más fría de la nevera: Usualmente, la parte más fría de la nevera es la que está más próxima al congelador.
Congelar postres
Congelar es otra opción popular para la conservación de postres. Aquí te explicamos cómo hacerlo correctamente.
- Envuelve bien tus postres: Usa papel film o papel de aluminio para envolver tus postres antes de congelarlos. Esto evita que se quemen por el frío y conserva mejor su textura y sabor.
- Descongela lentamente: Para evitar que tus postres se pongan gomosos o pierdan su textura, es mejor descongelarlos lentamente en la nevera.
Utilizar un deshidratador de alimentos
Si eres un amante de los postres y quieres que duren aún más tiempo, puedes considerar la deshidratación. Con un deshidratador de alimentos puedes conservar postres como manzanas y plátanos bañados en chocolate o frutas secas.
Con estos consejos, podrás disfrutar de tus postres favoritos en cualquier momento, sin importar cuánto tiempo haya pasado desde que los hiciste.
