Flores comestibles: no solo son un estallido de belleza en nuestros platos, sino que también pueden aportar sabor y textura. Y en el mundo de la repostería, donde la estética juega un papel tan importante, pueden convertirse en el toque final perfecto. Hoy, vamos a explorar tres formas de incorporar flores comestibles en tus postres.
1. Como decoración
Las flores comestibles pueden ser el elemento perfecto para darle a tus postres un toque extra de belleza. Aquí te dejamos algunas ideas para incorporarlas en tus creaciones:
-
En tartas y pasteles: puedes usar flores comestibles para adornar la parte superior de tus tartas. Por ejemplo, la rosa, con su amplia gama de colores, es una opción popular. También puedes usar flores pequeñas como la borraja o la violeta para adornar tortas pequeñas o cupcakes.
-
En galletas y bizcochos: anímate a añadir flores pequeñas en tus galletas o bizcochos antes de hornear. La lavanda, por ejemplo, puede darle a tus galletas un sabor y olor únicos.
-
En gelatinas y flanes: puedes sumergir flores comestibles en tus gelatinas o flanes para crear un efecto visual impresionante. Las flores claras, como el jazmín, son ideales para esta técnica.
2. Como ingrediente principal
Algunas flores comestibles tienen sabores tan característicos que pueden ser el ingrediente principal de tu postre. Aquí algunas ideas:
-
Helado de rosa: la rosa tiene un sabor delicado y floral que combina perfectamente con un helado cremoso. Solo necesitas pétalos de rosa, leche, nata y azúcar para esta receta.
-
Bizcocho de lavanda: la lavanda tiene un sabor fuerte y distintivo. Un bizcocho a base de lavanda puede ser una delicia para los más atrevidos.
-
Galletas de caléndula: la caléndula tiene un sabor suave, ligeramente amargo, que puede aportar un contrapunto interesante en unas galletas dulces.
3. Como infusión
Otra manera de incorporar flores en tus postres es mediante infusiones. Puedes crear infusiones con flores comestibles y usarlas para aromatizar tus creaciones. Por ejemplo, una infusión de flor de azahar puede darle un toque cítrico y floral a un bizcocho o a un flan. O puedes usar una infusión de jazmín para darle un aroma exótico a tu arroz con leche.
Esperamos que estas ideas te hayan inspirado a experimentar con flores comestibles en tus postres. Recuerda, la clave está en la experimentación y la creatividad.
