La repostería francesa es reconocida a nivel mundial por su exquisitez y delicadeza. Sus postres son una combinación perfecta de técnica, tradición e innovación. Aquí te presentamos una selección de los imprescindibles que debes conocer y probar.
Macarons
Los macarons son pequeñas delicias con base de merengue de almendra. Son dulces y crujientes por fuera, pero blandos y cremosos por dentro. Aunque parecen simples, requieren una gran precisión y técnica para su elaboración. Los macarons pueden encontrarse en una infinita variedad de colores y sabores.
Tarte Tatin
La Tarte Tatin es una tarta de manzanas caramelizadas que se cocina al revés. Es decir, se coloca la masa encima de las manzanas en lugar de debajo. Al final se invierte la tarta para que las manzanas queden en la parte superior. Es un postre delicioso y muy fácil de hacer.
Crème brûlée
La Crème brûlée es una crema pastelera a base de yema de huevo,crema y azúcar. Se caracteriza por su corteza de azúcar caramelizado en la superficie. El contraste entre la crema suave y la corteza dura es lo que hace a este postre tan especial.
Tarta de queso al horno
La tarta de queso al horno es un postre francés clásico. Se hornea a baja temperatura para conseguir una textura suave y cremosa. Es un postre sencillo pero delicioso, perfecto para cualquier ocasión.
Profiteroles
Los profiteroles son pequeños buñuelos de pasta choux rellenos de crema pastelera, nata o helado. Se suelen bañar con salsa de chocolate. Son un postre muy versátil ya que pueden rellenarse con lo que más te guste.
Aquí te dejamos una tabla con los ingredientes básicos de cada postre.
La repostería francesa es una disciplina que requiere precisión, paciencia y amor por lo que se hace. Con estas recetas y los ingredientes adecuados, podrás transportar a tus invitados al corazón de Francia con cada bocado.
